Papa aclara Fiducia suplicans
En la declaración se subrayaba que se trata de un documento de carácter pastoral y no doctrinal, y recordaba la doctrina sobre el matrimonio como “unión exclusiva, estable e indisoluble entre un varón y una mujer, naturalmente abierta a engendrar hijos” y sobre la sexualidad, reiterando que se trata de una enseñanza inalterada. Sin embargo, tanto la redacción algo enrevesada del documento como la novedad que introducía al permitir bendiciones no rituales a parejas en situación irregular o del mismo sexo han abierto la puerta a interpretaciones muy dispares, lo que ha llevado a una situación de desconcierto en no pocos lugares.
La Jornada de los Pobres.
Por la Jornada Mundial de los Pobres que se celebra este domingo 19 de noviembre, el Papa Francisco almorzó con 1200 personas en el Aula Pablo VI en el Vaticano.
Este grupo de personas que pudo compartir la comida con el Pontífice, también asistió a la Misa realizada esta mañana en la Basílica de San Pedro, en la que participaron unas cinco mil personas.
El almuerzo de hoy fue donado por los Hoteles Hilton de Italia. En el menú, el Santo Padre y sus invitados tuvieron canelones rellenos de ricota romana y espinacas en sala de queso parmesano reggiano.
Como segundo plato se sirvió albóndigas de carnes blancas salteadas, velouté de tomates San Marzano y albahaca con puré de coliflor. De postre hubo el tradicional tiramisú y petit fours, es decir pasteles pequeños y variados.
El Papa Francisco instauró la Jornada Mundial de los Pobres desde 2017, con la intención de que la Iglesia salga de sus muros para encontrar la pobreza en los múltiples significados en los que se manifiesta en el mundo de hoy.
El papa pide una Iglesia que acoja y sirva a todos en la clausura del Sínodo
Ciudad del Vaticano, 29 oct (EFE).- El papa Francisco pidió hoy que la Iglesia sea capaz de acoger y servir a todos, «a las mujeres y a los hombres de nuestro tiempo», en la misa que clausuró el Sínodo, la asamblea que reunió este mes a obispos, laicos y mujeres para abordar temas sobre el futuro de la Iglesia católica.
«Esta es la Iglesia que estamos llamados a soñar: una Iglesia servidora de todos, servidora de los últimos. Una Iglesia que no exige nunca un expediente de “buena conducta”, sino que acoge, sirve, ama. Una Iglesia con las puertas abiertas que sea puerto de misericordia», indicó el pontífice en su homilía.
El Papa a neocardenales: Sean la armonía que representa la sinodalidad de la Iglesia.
En la Plaza de San Pedro se ha celebrado el Consistorio en el que el Papa ha creado 21 nuevos cardenales, 18 de ellos electores y 3 no electores: como en el día de Pentecostés, la diversidad de sus lenguas es un nuevo aliento para la Iglesia, «sean evangelizadores evangelizados y no funcionarios»
Esa Iglesia santa, apostólica y «madre, que habla en todas las lenguas, que es una y es católica», nacida en Pentecostés, cuando los apóstoles se reunieron en Jerusalén junto a los judíos que allí vivían, pero también con partos, medos, elamitas y otros muchos pueblos de diversos países que los oían hablar en sus propias lenguas, Francisco la vislumbra en el nuevo Colegio Cardenalicio, ampliado hoy con la creación de 21 cardenales, de los que 18 son electores y 3 no electores. Luis Pascual Dri, confesor en el Santuario de Nuestra Señora de Pompeya de Buenos Aires, no ha estado presente entre ellos. En la homilía del Consistorio celebrado en la Plaza de San Pedro iluminada por un cálido sol de finales de septiembre, donde, entre unos 12.000 fieles, destacan los birretes rojos de todo el mundo, el Papa subrayó las distintas procedencias de sus más estrechos colaboradores recordando la imagen de una orquesta.
Una Iglesia sinfónica y sinodal
Para Francisco, «el carácter sinodal de la Iglesia» es como una sinfonía, en la que cada instrumento brinda su propia contribución, «a veces solo, a veces unido a algún otro, a veces con todo el conjunto». Pero «la diversidad es necesaria, es indispensable», aunque si, explica el Papa, «cada sonido debe contribuir al proyecto común», y por eso «es fundamental la escucha recíproca. Cada músico debe escuchar a los demás». Mientras que » el director de la orquesta está al servicio de esta especie de milagro que representa cada ejecución de una sinfonía», a él le corresponde «escuchar más que todos los demás» y «ayudar a cada uno y a toda la orquesta a desarrollar la fidelidad creativa, la fidelidad a la obra que se está ejecutando». Y es precisamente la imagen de la orquesta la que enseña «mejor a ser Iglesia sinfónica y sinodal», y por eso Francisco la propone al Colegio Cardenalicio, «en la reconfortante confianza de que tenemos como maestro al Espíritu Santo, maestro interior de cada uno y maestro del caminar juntos», que «crea la variedad y la unidad» y que «es la misma armonía».
Ser evangelizadores evangelizados y no funcionarios
El Papa cita varias veces el pasaje evangélico que habla del «bautismo del Espíritu Santo», del don del Evangelio recibido en varias lenguas, que debe suscitar asombro y gratitud por la Buena Noticia que nos ha llegado «en nuestras lenguas, a través de los labios y los gestos de nuestros abuelos y de nuestros padres, de los catequistas, de los sacerdotes, de los religiosos», transmitida también «en dialecto, por las madres y las abuelas».
Somos evangelizadores en la medida que conservamos en el corazón el asombro y la gratitud de haber sido evangelizados; más aún, de ser evangelizados, porque en realidad se trata de un don siempre actual, que requiere ser renovado continuamente en la memoria y en la fe. Evangelizados evangelizadores y no funcionarios.
PRIMERA VISITA DE UN PAPA A MONGOLIA QUE CUENTA TAN SOLO CON 1400 FIELES
El Francisco sigue así los pasos del fraile franciscano que llegó a Mongolia en el siglo XIII, en un viaje que tiene una importancia evangelica pero también geopolítica para estrechar posibles lazos con Pekín y Moscú
Francisco tras los pasos del fraile franciscano Giovanni da Pian del Carpine que llegó a Mongolia en 1246, enviado por el papa Inocencio IV, para evangelizar a las tribus de las estepas asiáticas.
El papa llegó este viernes a Ulán Bator, siendo el primer pontífice que visita este país de casi tres millones y medio de habitantes, con una diminuta comunidad católica de 1400 personas.
A su llegada, fue recibido por la ministra de Asuntos Exteriores, Battsetseg Batmunkh, y por una joven que le ofreció yogur seco, una usanza típica del país, y después se reunieron durante algunos minutos en una sala del aeropuerto ya que la ceremonia oficial de bienvenida se celebrará mañana sábado, pues descansará durante toda la jornada pare recuperarse de las 9 horas y media de vuelo y del cambio horario.